Piden 7 años de cárcel para un enfermero cubano acusado de abusar de una paciente.

Las Palmas de Gran Canaria, 10 dic (EFE).- El Ministerio Fiscal ha solicitado hoy a la Audiencia de Las Palmas una pena de siete años de cárcel para un enfermero que supuestamente abusó de una paciente cuando le hacía una cura de un quiste en el pecho y de otro en la ingle, mientras que su abogado ha reclamado su absolución.

El enfermero, César Felipe H.W., de 48 años, ha negado ante el tribunal haberle hecho tocamientos a la enferma y ha dicho que se limitó a curar a la paciente y que su actuación fue la normal.

El acusado ha admitido que dice frases cariñosas a sus pacientes debido a su "idiosincrasia", ya que es cubano y son propias de su país, y que lo hace para tranquilizarles.

El procesado, que fue condenado en 2011 por hechos similares, se enfrenta a una pena de siete años de prisión, según la petición del fiscal, quien considera convincente el relato de la víctima, que entiende que ha sido corroborado por testigos de referencia y por los informes de las psicólogas forenses, que lo califican de "coherente, congruente y válido".

El fiscal interesa además que el acusado, en caso de que sea condenado, permanezca en libertad vigilada por un plazo de seis años, indemnice a la víctima con 6.000 euros y se le prohíba acercarse ni comunicarse con ella por un periodo de ocho años.

La defensa solicita la absolución de su cliente, pues entiende que el relato de la denunciante es incoherente y contiene numerosas contradicciones, al tiempo que sostiene que el informe de las psicólogas forenses es incompleto por no constar en él que la paciente sufría de agorafobia con anterioridad a los hechos que se juzgan.

Según las conclusiones del fiscal, como consecuencia de los hechos vividos, la víctima padece un trastorno adaptativo con síntomas de agorafobia.

La paciente ha manifestado que el enfermero le metió los dedos en su vagina y le tocó los pechos, y que se quedó bloqueada en el momento de los hechos, si bien fue consciente de que su actuación no era la debida y que estaba abusando de ella.

Los hechos ocurrieron en el centro de salud de Carrizal de Ingenio, en Gran Canaria, sobre las 12,00 horas del 6 de mayo de 2011, cuando el acusado procedió a la cuarta cura de la paciente.