Tenía en su restaurante un loro gris de cola roja, ave protegida y en peligro de extinción.

La Guardia Civil recupera en Lanzarote un espécimen de ave protegida y en peligro de extinción

· La persona identificada como su propietario ha sido investigada como supuesto autor de un delito de tráfico ilegal de especies protegidas o en peligro de extinción


30 de enero de 2019.- El Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil ha investigado, el pasado día 15 del mes en curso, a una persona de nacionalidad española y 51 años de edad como presunto autor de un delito de tráfico ilegal de especies protegidas o en peligro de extinción, al tener en un local comercial enjaulado un ejemplar de loro gris de cola roja (pisttacus erithacus). CITES, Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres

Dicha tipo de loro está recogida como especie en peligro de extinción, al estar clasificada en los Apéndice I del Convenio Whashington, de 3 de Marzo de 1973- CITES, así como en el Anexo A del Convenio Europeo 338/97 de protección de fauna y flora silvestres mediante el control de su comercio.

Inspección

Una inspección regular realizada en un restaurante, situado del municipio de Haría, permitió a los agentes del SEPRONA encontraran expuesto al público en una jaula del negocio un ejemplar de loro gris cola roja, el cual está catalogado en peligro de extinción (CITES).


Rápidamente le requirieron al titular del local la preceptiva documentación que amparase la legal posesión del loro, manifestando éste que carecía de ella.

Seguidamente los agentes incautaron el animal, comprobando que tampoco lleva el microchip o anilla identificativa, siendo trasladado a un centro rescate de fauna autorizado en el municipio de Tías.

Por todo ello el SEPRONA se puso en contacto nuevamente con el presunto dueño del ejemplar, comunicándole su investigación como presunto autor de un delito de tráfico ilegal de especies protegidas o en peligro de extinción, quedando a disposición del correspondiente Juzgado en funciones de guardia de la localidad de Arrecife. Al mismo tiempo, se comunica los hechos al Administrador de Aduanas y al SOIVRE (Sanidad Exterior).