Pescando en la prohibida Reserva Marina de la isla de La Graciosa.

La Guardia Civil denuncia a dos personas por pescar en la Reserva Marina de la isla de La Graciosa

· La actuación de un agente franco de servicio permitió la actuación conjunta de Guardia Civil y del Servicio de Vigilancia de la citada reserva

18 de julio de 2019. La Guardia Civil en Lanzarote ha denunciado a dos varones vecinos del municipio de Tías, por cuatro infracciones administrativas a la Ley 17/2003, de 10 de abril, de Pesca de Canarias, al capturar 20 kilogramos de diferentes tipos de especies marinas en una zona protegida.

Agente franco de servicio

En torno a las 10:00 horas un agente franco de servicio que se encontraba en la playa de la Cantería, en el municipio de Haría, observó a dos personas con trajes de neopreno que se dirigían al norte de la citada playa, en una zona debajo de los riscos hacia Punta de los Fariones.

El agente en cuestión se puso en contacto con el SEPRONA de la isla para comentarle la situación, confirmando que estaba prohibido en dicho lugar la realización de la pesca submarina por encontrarse dentro de la Reserva Marina de la isla de La Graciosa, y que solamente está permitida algunas modalidades de pesca bajo autorización de la Viceconsejería de Pesca del gobierno autonómico.

Seguimiento

Es por ello que el SEPRONA da aviso a la patrulla territorial del Puesto Principal de Costa Teguise y a la patrullera del Servicio de Vigilancia de la Reserva Marina de la isla de La Graciosa; ésta última inspecciona la zona y no encuentra a las dos personas en cuestión en los riscos, ni tampoco boyas de señalización que indicaran que estaban realizando pesca submarina.

Identificación y denuncias

Sin embargo el turismo en el que llegaron las dos personas en cuestión seguía estacionado en las cercanías de la Playa de la Cantería, por lo que la patrulla esperó en la costa a que acudieran al citado.

Finalmente en torno a las 18:00 horas la Guardia Civil identifica a las dos personas indicadas, los cuales llevaban todo el material necesario para la práctica de la pesca submarina (neoprenos, fusiles, plomos, aletas, etc.), y 20 kilogramos de diferentes especies marinas como pulpos, morenas, etc, que fueron entregados posteriormente al complejo mediambiental de Zonzamas.

Los agentes comprobaron además como una de las personas carecía de licencia para la pesca submarina, por lo que fueron denunciados por varias infracciones a la mencionada Ley 17/2003, como:

- realizar una actividad prohibida (la pesca submarina) en una zona protegida

- Ejercicio recreativo de la actividad pesquera sin disponer de la preceptiva autorización: en este caso a una sola de las personas en cuestión

- Capturar más de lo permitido por persona en pesca recreativa (cinco kilogramos por persona y día).

- La falta de señalización reglamentaria en el ejercicio de la actividad pesquera.