* Cinco de los delitos se desarrollaron en el interior de unas viviendas habitadas de los barrios de Saucillo, Caideros y Fagajesto del municipio de Gáldar
27 de diciembre de 2016.- La Guardia Civil del Puesto Principal de Santa María de Guía, en Gran Canaria, ha procedido a la detención los pasados 19 y 20 de diciembre de dos personas de nacionalidad española e iniciales N.M.A. y E.M.S.P., de 21 y 24 años de edad respectivamente y con numerosos antecedentes policiales, como presuntos autores de seis (06) delitos contra el patrimonio y el orden socioeconómico, cometidos entre el 11 y el 27 del pasado mes de noviembre.
Inicio de la investigación
La investigación se inició el mismo mes de noviembre a raíz de la presentación de diversas denuncias por parte de vecinos de los referidos barrios, comunicando una serie de robos en el interior de viviendas, la mayoría de tipo cueva, que presentaban todas una característica similar y era su aislamiento.
Modus operandi
Los presuntos autores se desplazaban a viviendas rurales apartadas y poco frecuentadas, forzando mediante palancas los diferentes accesos de la propiedad, logrando así sustraer diversos objetos entre los que destacan los pequeños electrodomésticos (estufas, televisores, etc.), maquinaria y herramientas varias; siempre objetos que pudiesen transportar y vender luego fácilmente.
Localización de efectos sustraídos y detenciones
Las pesquisas policiales, que contaron con la importante colaboración ciudadana, permitieron a los agentes localizar y detener a dos personas relacionadas con los hechos, permitiendo recuperar hasta la fecha uno de los objetos robados aunque se trabaja en la recuperación de los restantes.
De esta manera los detenidos han pasado a disposición Judicial de los Juzgados de Santa María de Guía, como supuestos autores de seis delitos de robo con fuerza en las cosas, cometidos cinco de ellos en viviendas.
Receptación
Desde la Guardia Civil se recuerda que adquirir bienes procedentes de robos y hurtos está tipificado penalmente en el artículo 298 del Código Penal, acarreando penas de prisión de seis meses a dos años; además al adquirir ese tipo de bienes fomenta comportamientos delictivos y que se sigan cometiendo robos similares.