Los okupas se fueron pero dejaron un gato encerrado, en Las Palmas de Gran Canaria


Vecinos de la capital intentan alimentar sin éxito a un gato abandonado por okupas

La plataforma de difusión animal Leales.org informa que vecinos de la urbanización los Alisios, en Las Mesas - Tamaraceite - Las Palmas de Gran Canaria están preocupados por la vida de un gato que unos okupas dejaron encerrados después de abandonar la vivienda.

Según cuentan los vecinos, el dueño de la vivienda vive en la península y el juzgado no permite la entrada al inmueble por no ser el titular del mismo.


En su desesperación, los vecinos intentan echarle agua y trozos de jamón por debajo de la puerta, después de escuchar unos maullidos incesantes que según ellos se debe a la falta de agua y alimento.

Habrá que esperar a que otros okupas entren a vivir al inmueble y salven al gato abandonado, porque nadie atiende la alerta vecinal en este barrio de Las Mesas - Tamaraceite.

» ubicación: https://goo.gl/maps/54cWCbwebV2d18KK6


Las redes se movilizan y realizan cientos de llamadas a la policía local para presionar y que rescaten al ya famoso gato de la Urbanización Los Alisios - Tamaraceite - Las Palmas de G.C.

Lo que en un principio fue una respuesta tajante por los bomberos, parece que empieza a suavizarse. La cuestión es que los bomberos afirmaban que necesitaban orden de la policía local para movilizarse y la policía local necesitaba autorización judicial para poder entrar al chalet que unos okupas abandonaron con un gato encerrado dentro y que ya hace una semana que no come ni bebe agua.

Pero los ciudadanos en las redes afirman que al llamar al Seprona les han remitido a la policía nacional, la cual remite nuevamente a la policía local y sigue el círculo sin sentido mientras los vecinos se desesperan y los internautas empiezan a preguntar el lugar para entrar de cualquier forma aunque sea ilegal.

La comisaría centro de la capital ha recibido tal aluvión de llamadas que lo que era antes imposible ahora van a intentar acceder con los bomberos a través del jardín del vecino, pero sin romper nada y sin tocar la propiedad afectada.

El caso vuela también por los grupos animalistas de WhatsApp donde incluso se plantean si hay un incendio probablemente irán...

Dos protectoras están en la zona esperando la ansiada visita policial y de bomberos, la cual mientras llega los vecinos que no conocen la historia han denunciado a la policía a las protectoras, creyendo que eran las okupas que lo habían abandonado.

Todo un culebrón que pone de manifiesto el vacío legal cuando un animal está encerrado en un hogar y los vecinos tienen constancia de un maltrato animal. Al parecer, los únicos que pueden solucionar estos casos son... los okupas.