Gastó 8.300€ en la noche en clubes de alterne y denunció para que le devolvieran el dinero, en Puerto Rico.

La Guardia Civil investiga a una persona por simulación de delito en Gran Canaria

30 de enero de 2019.- La Guardia Civil del Puesto Principal de Puerto Rico-Mogán, en Gran Canaria, investigó el pasado día 25 de enero a una persona de iniciales H.B., turista de nacionalidad extranjera de 47 años de edad y sin antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de simulación de delito, al fingir una estafa de 8.300 euros en una cuenta bancaria asociada a una tarjeta de su propiedad, con el supuesto fin de que el banco le devolviera dicha cantidad de dinero.

La investigación comenzó a raíz de la denuncia de H.B. el pasado día 23 en dependencias de la Guardia Civil de Puerto Rico, informando a los agentes que estaba de fiesta con un amigo en la zona de Puerto Rico y que dos mujeres le invitaron a un local de ocio en cuestión, tomando una copa con ellas y que luego no recordaba nada más, sospechando que le habían puesto alguna sustancia estupefaciente en su bebida, al darse cuenta a la mañana siguiente que le habían realizado diferentes cargos a su cuenta que sumaban 8.300 euros.

Sin embargo los agentes del Área de Investigación del citado Puesto desconfiaron de la versión del denunciante, confirmando sus dudas tras obtener varios indicios a partir video grabaciones, manifestaciones de varios testigos y otras pesquisas policiales, que señalaban a que H.B. había frecuentado esa noche varios locales o clubs de alterne, gastando de manera voluntaria en los mismos la referida cantidad de dinero.

Por todo ello la Guardia Civil investigó a H.B. como presunto autor de un delito de simulación de delito, quedando a disposición del correspondiente Juzgado, en funciones de guardia, de la localidad de Maspalomas.

Penas por la simulación de delito

Cabe destacar que la simulación de un delito puede conllevar penas que van desde los 6 meses de hasta los 2 años de cárcel, o multas que irían desde los 3 hasta los 24 meses, dependiendo del nivel de gravedad del falso delito y de falsas imputaciones a terceras personas.

Este tipo de denuncias además causa un grave perjuicio a las unidades policiales que las reciben, puesto que motivan que se consuma una serie de recursos de personal, tiempo y material, afectando considerablemente al normal desarrollo de las investigaciones que se realizan por hechos reales.