Incautan peligrosos caracoles gigantes africanos en Santa Lucía.

La Policía Autonómica se incauta de dos ejemplares de caracoles gigantes africanos, una especie invasora incluida entre las cien más dañinas del mundo

La Achatina fulica tiene un efecto devastador sobre los cultivos y la salud humana.

El Grupo de Medio Ambiente (GRUMA) del Cuerpo General de la Policía Canaria se incautó de dos ejemplares adultos de Caracol Gigante Africano (Achatina fulica), especie incluida en el Real Decreto 630/2013, de 2 de agosto por la que se regula el Catálogo español de especies exóticas invasoras, considerada, además, como una de las cien especies exóticas invasoras más dañinas del mundo, por su efecto devastador sobre los cultivos y por ser transmisor de parásitos peligrosos para la salud humana.

La intervención, enmarcada en las operaciones de control de las especies exóticas invasoras efectuadas por este grupo policial, tuvo lugar en el municipio de Santa Lucía de Tirajana, donde se localizó al propietario, que trataba de comerciar con estas especies a través de una página web, motivo por el cual se emitió la correspondiente acta de infracción.

Esta especie, considerada como una de las peores plagas a nivel mundial, crece y se reproduce a gran velocidad, ocasionando un enorme desequilibrio de los ecosistemas y el hábitat donde se introducen.

El Grupo de Medio Ambiente de la Policía Canaria recuerda que, según se recoge en la Ley 33/2015, de 21 de septiembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, se considera como infracción grave la ausencia de la correspondiente autorización administrativa de posesión, transporte, tráfico o comercio de especies incluidas en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, con multas que oscilan desde los 3.001 euros hasta los 200.000 euros.

Esta especie es nativa de África y, como toda especie introducida, trae una problemática asociada porque no tiene depredadores naturales que controlen sus ciclos de reproducción. Como consecuencia, se expande y desplaza a las especies nativas, desequilibrando el ecosistema.

La Achatina fulica tiene una concha cónica estrecha cuyo largo duplica su ancho, y contiene de siete a nueve espirales cuando el caracol está bien desarrollado. La concha es generalmente de color marrón rojizo con algunas manchas verticales de un tono amarillento.

Los adultos de esta especie pueden superar los 20 cm de longitud de la concha, pero el tamaño promedio es de unos 10 cm. Este molusco es peligroso por ser un vector de nemátodos del género Angiostrongylus, parásitos presentes en los pulmones de ratas, que pueden causar afecciones de salud en humanos por el contacto o el consumo del animal.