Paella gigante para despedir las fiestas de El Tablero.


Vídeo de Gonzalo Santana.

El Tablero despide sus fiestas con una nueva paella gigante.

Fue elaborada por 25 profesionales de la Asociación Sociocultural de Cocineros, Reposteros y Panaderos Mojo Picón, con productos donados por la cadena hotelera Riu.

Los vecinos de El Tablero volvieron a disfrutar este domingo de su tradicional paella gigante para 5.000 comensales, elaborada por 25 profesionales de la Asociación Sociocultural Mojo Picón de cocineros, reposteros y panaderos.

La paella fue repartida por miembros de la comisión de fiestas, concejales del gobierno municipal con el alcalde Marco Aurelio Pérez entre ellos, y por integrantes de las asociaciones profesionales de gobernantas y camareras de piso, mientras que las asociaciones de maitres, camareros y barmans asumieron la dispensa de la bebida.

Los preparativos de la paella se iniciaron temprano, sobre las nueve de la mañana, con los últimos ecos de la diana floreada por la Banda Guanche. A esa hora una cuadrilla de operarios de la Concejalía de Vías y Obras colocaron en círculo los 200 bloques de la estructura para el fuego, y repartieron en su interior los 400 kilos de leña seca y 200 de carbón de castaño y almendro que se prendieron a las 11:30 horas con 25 litros de gasoil.


Aquella madera ardió durante una hora, mientras el párroco Gregorio Mateos Borrego regia la misa que fue amenizada con aires canarios por la Agrupación Folclórica Faro de Maspalomas. En la homilía el cura aludió al santo misterio de la Trinidad y al “camino de Jesucristo como el único capaz de ofrecer la salvación porque él es la verdad y la vida”, dijo.

Sobre las 12:30 horas, el cocinero jefe del Hotel Parque Cristóbal, José Luis Navarro, ordenó el arrojo de los numerosos ingredientes dentro de la paellera, elaborada en 1990 con hierro y acero, con un diámetro de 5 metros y 22 centímetros de alto. A esa misma hora se iniciaba por las principales calles del pueblo, Venezuela, Puerto Rico, Brasil y Avenida de Las Américas, la procesión de los iconos de la Virgen del Carmen y de la patrona Santísima Trinidad, acompañadas por centenares de parroquianos que avanzaron al ritmo marcado por los cinco componentes de la Banda Guanche. El párroco la había convocado “en silencio”, como “un ejemplo evangelizador de los vecinos” y  como “una muestra catequista de fe en la trinidad del Padre, del Hijo y del Espíritu”.

En números.

Los ingredientes que se emplearon en la elaboración de la paella, donados por la cadena hotelera Riu, se removieron y mezclaron con 6 palas y dos rastrillos de unos 6 metros de longitud. En total fueron 70 litros de aceite de oliva, 25 kilos de ajos fileteados, 100 kilos de cebolla sofrita, 100 kilos de pimientos rojos y verdes, 160 kilos de pata de cerdo cortados en dados, 230 kilos de jamoncitos de alas de pollo, 200 kilos de chocos, 100 kilos de tomates molidos, 700 litros de caldo, 2 kilos de colorante amarillo, 10 kilos de pasta de caldo concentrado, 10 kilos de sal fina, 350 kilos de arroz vaporizado, 60 kilos de judías verdes, 60 kilos de guisantes, 60 kilos de mejillones, 160 kilos de langostinos, unos 50 kilos de pimientos morrones, 30 manojos de perejil picado y 25 kilos de limones. Los platos de paella se repartieron acompañados de 4.000 panes e igual número de servilletas, platos y tenedores.