Los actos que ha organizado el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, con la colaboración del Cabildo de Gran Canaria, para despedir el año y estrenar el 2012, estarán en esta ocasión enlazados con el inicio del 50 aniversario del nacimiento de Maspalomas-Costa Canaria en el Sur de la Isla, donde se han organizado diversas actividades para los vecinos, visitantes y turistas, en dos escenarios simultáneos para elegir.
Dado el carácter especial que se le confiere al 2012 desde el Ayuntamiento, con motivo de la celebración del Cincuentenario de Maspalomas, la entrada del nuevo año simbolizará el inicio de la conmemoración, por lo que habrá una fiesta-espectáculo en la pista de patinaje, a partir de las 23:00 horas, con animaciones, presentaciones, música, baile y concursos, con 20.000 watios de sonido y 40.000 de iluminación. Además, como punto diferenciado, habrá otro espacio para los jóvenes en la Plaza de San Fernando, con música disco y fiesta; ambas con importantes medidas de seguridad. Al mismo tiempo, en la plaza de la Villa de Tunte habrá un espectáculo similar, que incluye uvas, cotillones y actividades musicales.
Cabalgata. En la rueda de prensa en la que se dio a conocer el programa de actividades de la Noche Vieja, también se ofrecieron detalles de los cambios que experimenta el próximo 5 de enero, la Cabalgata de Reyes. Tanto el alcalde como el concejal de Festejos, Marco Aurelio Pérez y José Carlos Alamo, respectivamente, anunciaron que la Cabalgata se transformará en una gran recepción a los Reyes Magos, tomando el Estadio Municipal de Maspalomas como centro de una amplio programa de actividades donde habrá carrozas, juegos, animaciones y atracciones para los más pequeños y sus familias. Los organizadores han previsto varias sorpresas, de la que ahora se puede adelantar que los Reyes Magos llegarán en un helicóptero al Centro Mágico, que será el Estadio, y vendrán precedidos por varios paracaidistas desde el aire, además de otras novedades.
La Cabalgata por las calles de San Fernando se ha cambiado, atendiendo tanto al decaimiento del acto, como a la petición de los comerciantes de la zona que veían alteradas sus actividades en el día de la víspera de la llegada de los Reyes Magos.
